sábado, 23 de mayo de 2015

Amor propio

Hace poco, hablando con una amiga, me dijo que su prima siempre se alababa a sí misma cuando se miraba en el espejo. Que al principio le parecía una creída, hasta que ella le dijo: "Es que si no me lo digo yo, ¿quién lo va a hacer?". 
Y esa es exactamente la idea que tengo yo. No el "nadie me lo dice, así que tengo que decirlo yo para sentirme mejor conmigo misma", sino el "yo soy la única persona cuyo criterio tengo que tener en cuenta, todo lo que me digan personas ajenas es su opinión y no tiene nada que ver conmigo".
Yo creo que algo que todo el mundo debería hacer es enfrentarse al espejo. Ponerse delante de él y mirarse hasta no dejarse un solo defecto que encontrar y aceptar. La mayor parte de las personas buscamos la aprobación ajena y nos olvidamos de la nuestra propia. Vivimos con complejos. Y en especial las mujeres, con todos esos estereotipos que nos inculcan los medios de comunicación. Nos pasamos la vida intentando ser modelos o lamentándonos por no conseguirlo, cuando realmente una modelo también tiene "imperfecciones" que los medios consideran feas. A las modelos de las revistas, a esas mujeres perfectas, también las retocan, también las estilizan, también les quitan kilos digitalmente.
Y nosotras nos pasamos la vida añorando ser como mujeres que no existen, en vez de querernos como somos, con nuestras imperfecciones humanas, que no son bonitas porque los demás nos dicen que no son bonitas. La belleza no es objetiva, y la aprobación social tampoco. Si tú no te quieres, si tú no te gustas como eres, si tú no te respetas a ti misma, entonces es probable que te juntes con quien tampoco lo haga. No busques el amor ajeno en ausencia del propio.


En relación con esto, dejo un fragmento de una entrevista que le hicieron recientemente a Till Lindemann (cantante de RAMMS+EIN) acerca de su nueva banda LINDEMANN (originalidad al poder). En caso de querer leerla entera, pinchar aquí.
 
"- ‘Fat’ habla de la belleza de las curvas de una mujer. ¿Qué mensaje lanzarías a las mujeres del mundo que se miran al espejo y no se gustan?
Till- (En español) ¿Gordas, no? (risas). El mensaje que se transmite en la canción es “gústate, quiérete”, no importa lo que diga la gente de ti. Sin embargo, si tú no sabes quererte y gustarte, tienes realmente un problema, y por supuesto “me gustan las gordas” (en español). ¡Quiérete a ti mismo!, es el mensaje que quiero transmitir constantemente. No me gusta la gente que no sabe valorar quién es solo por tener unos kilos de más, o que no ve quién es realmente. Me gustan las mujeres gordas que saben lo que quieren y van de frente. Realmente me gusta verlas como se lavan el pelo, ducharse, olerlas, ver que están bien consigo mismas (risas)".

domingo, 17 de mayo de 2015

Día Contra la Homofobia

Hoy vuelve a ser 17 de mayo. El año pasado publiqué una entrada al respecto, y este año toca otra vez.
En 2014 no me explayé demasiado escribiendo, ahora no recuerdo si por falta de ganas, de tiempo, o de inspiración.
Sin embargo, hoy quiero plantear una cosa (no sé si la habré mencionado anteriormente, pero si fue así, la repito). 
Pese a las agresiones homófobas, pese a seguir utilizando palabras como "maricón", pese a que la palabra gay se sigue considerando ofensiva, casi cualquier persona a la que le preguntes te dirá: "¿Para qué seguir protestando si la igualdad real ya está conseguida?". 
Les mencionas todo lo anterior y responden cosas como: "Son casos aislados", "bueno, también les dan palizas a heterosexuales", "los gays se llaman cosas peores entre ellos", "la palabra gay es ofensiva para los heterosexuales igual que la palabra heterosexual es ofensiva para los gays". Después de oír tantas cosas de este tipo, he llegado a la conclusión de que es inútil convencer a nadie con lógica. Pero he descubierto que si empiezas a h*stias se callan otras cosas más "triviales", en las que la gente no se suele parar a pensar, acaban con cualquier posible argumento.
Por ejemplo, el cine. Siempre que hablo de esto, la gente con la que estoy hablando se calla y cambia de tema o se va. Es una reacción más sana para mis nervios que el que empiecen a decir cosas como las de arriba. Lo que yo les digo es que, si hay tanta igualdad, ¿por qué no hay películas con protagonistas homosexuales, cuyo argumento no gire en torno a la orientación sexual de sus personajes? ¿Por qué si el protagonista es un chico gay, la película tiene que ir de sus problemas amorosos en relación con el resto del mundo? ¿Por qué no puede ser una película de superhéroes, en la que el protagonista sea homosexual? Y me da igual que sea homosexual, que bisexual, que transexual, que intersexual, lo que quiero es que se normalice todo aquello que disienta del heterocentrismo. Quiero que el argumento de la película sea independiente de la orientación sexual de su o sus protagonista(s).




Este vídeo lo hice como un trabajo para la clase de Informática. Al final no fue éste el que presenté porque hice otro mejor. El vídeo es algo cutre porque en ningún momento pensé en subirlo a la red, pero, ya que no lo entregué, no voy a privar al mundo de él, ¿no?
Casi todas las imágenes son de la fotógrafa Braden Summers, junto con dibujos de Ismael Álvarez y fotografías varias, entre las cuales hay algunas de Till Lindemann, cantante de Rammstein. En los créditos sólo aparecen los nombres de los dos primeros; el resto de los individuos presentes están incluídos en "Gente desconocida", dado que el editor tiene unas capacidades limitadas y no había espacio suficiente para todos los nombres.
La canción es "You belong to me" de la banda sonora de Shrek.




sábado, 16 de mayo de 2015

Adoctrinamiento everywhere

Dije que volvería con mis reflexiones profundas. De verdad que lo he intentado, pero o no he llegado a nada o no me acuerdo. Ahora estoy empezando con la temporada de exámenes -sin gana alguna- y apenas tengo tiempo para pensar detenidamente en los misterios de la vida y el universo.
De lo que sí me he dado cuenta, y no me ha hecho falta pensar mucho, es del adoctrinamiento escolar que sufrimos diariamente, no en todas las asignaturas, pero sí en algunas.
En mi caso no es grave, porque yo tengo una ideología y recibo una educación política fuera del ámbito académico. Pero si yo estoy aún tan verde y empezando a coger forma, no quiero ni pensar en lo moldeables que pueden ser otras tantas personas.
Ya no me refiero a que un profesor X se dedique a hablar en clase de su pasividad política o de su opinión sobre ciertos partidos aun sin tener esto nada que ver con la asignatura. Eso tiene menos relevancia. Aunque me sigue pareciendo mal.
 En el libro "Educación para la Ciudadanía: Democracia, Capitalismo y Estado de Derecho" se habla al principio del adoctrinamiento escolar, que puede ser ejercido por profesores o profesoras de determinados departamentos y no puede ser ejercido por otros. Ponen como ejemplo a dos profesores de campos diferentes: Matemáticas e Historia. Un profesor/a de Matemáticas no puede adoctrinar políticamente al alumnado dado que el lenguaje matemático es objetivo. Ni las ecuaciones ni los polígonos son ni de izquierdas, ni de derechas ni "centrales". Por lo tanto, para que el profesor/a de Matemáticas pueda adoctrinar a sus alumnxs tiene que salirse del tema y hablar subjetivamente.
Sin embargo, otrx profesor/a que dé clase de Historia no tiene la necesidad de salirse de contexto. Simplemente tiene que contar la Historia a su manera, y puede posicionarse del lado que le venga en gana.
En este caso de adoctrinamiento del que me quejo yo, el problema es precisamente la Historia. Ciertamente, otros muchos miembros del profesorado se salen de contexto durante las clases por comentarios de alumnxs, y entran en una conversación a nivel personal. Es decir, está claro que hablan subjetivamente, y que no tiene nada que ver con la asignatura. Pero no están teniendo en cuenta (o sí) que están manteniendo una conversación a nivel personal con personas mucho más jóvenes, inexpertas y moldeables, que probablemente no tengan siquiera un mínimo intento de ideología política y que tomen esa opinión del profesor/a como un referente al tratarse de una persona adulta con estudios y un trabajo estable. Pero, en el caso de las clases de Historia, no es únicamente el relato subjetivo de los hechos históricos del profesor, sino también el propio libro.
En este punto del curso la doctrina resulta mucho más evidente que en los meses anteriores. Ahora mismo, el tema que estamos dando es "el mundo dividido en bloques: Capitalismo y Comunismo". El otro día lo estuve leyendo todo junto y me reí un montón (por no llorar) porque es una cosa súper descarada. Trata diferentes aspectos, alternando página a página el bloque capitalista y el bloque comunista. EE.UU. y la URSS. Algo que pasa en todos y cada uno de los párrafos del tema es:
  • Se habla de las medidas capitalistas (subida de impuestos, bajada de salarios, privatización, etc.) como algo que perjudica al proletariado pero que "es necesario para el progreso económico y social del Estado; malo en un principio pero con resultados beneficiosos para todo el mundo".
  • Se habla de algunas medidas tomadas en la Unión Soviética (nacionalización de los medios de producción, necesidades básicas cubiertas gratuitamente para todo el mundo, etc.) como "aparentemente buenas, pero de escasa calidad, sin futuro, obsoletas, etc".
Cuando se habla de la "supuesta inexistencia de las diferentes clases sociales" en el sistema comunista, pone después que "en la teoría era así, pero en la práctica había una clara diferencia entre los miembros del Partido Comunista y el resto de la población", mientras que no se mencionan en momento alguno las desigualdades sociales existentes en el sistema capitalista.
Por no mencionar que dejan de héroe al señor Borís Yeltsin, ya que "gracias a él fue sofocado el golpe de estado que iba a dar Gorbachov y se disolvió la URSS".
Yo no puedo presumir de saber mucho de todo esto porque, dentro de mi interés político, todavía soy bastante ignorante. En lo que al libro se refiere, al no saber si me lo estaba tomando demasiado a pecho, pregunté a otras personas, mayores, con más experiencia, más conocimientos políticos, etc. ¿Qué me dijeron? Que sí. Que se notaba descaradamente.
Pero, en fin, era visto. Si hace unos meses le pregunté al profesor de Historia si no nos podría poner el Manifiesto Comunista como lectura obligatoria y me dijo que no, escandalizado.
Así que, lo que me queda es desahogarme un poco e intentar sacar argumentos convincentes de los vídeos de Masademócrata.
...Tengo demasiado tiempo libre.



domingo, 3 de mayo de 2015

Día de la Madre

Muchas personas creen que el que yo esté a favor del aborto significa que estoy en contra de la maternidad. Pues no. Yo estoy a favor de que las mujeres puedan abortar si lo consideran necesario.
Aprovecho el día de hoy para hablar de esto porque me parece una buena oportunidad. Yo no estoy en contra de la maternidad. Más bien todo lo contrario. A mí, personalmente, me aterra la simple idea de abortar, ya sea voluntariamente o de forma natural.
Yo, como todo el mundo (o casi), también tuve una etapa de "yo no voy a tener hijos". Algunxs la hemos tenido durante nuestra infancia, otrxs todavía siguen en ella y otrxs no cambiarán nunca de idea. Es, obviamente, una decisión personal.
Mi visión de la maternidad ha cambiado drásticamente en muy poco tiempo. Del ya mencionado "yo no voy a tener hijos" pasé a quedarme mirando con anhelo todos los bebés y niñas y niños pequeñxs que veo por la calle.
Independientemente de todas mis aspiraciones personales en relación con la literatura, la ortografía, la corrección y el activismo social, una de mis principales metas es la de ser madre. Una buena madre.
No quiero ser madre porque "ese es mi deber como mujer". Quiero ser madre porque la maternidad me parece algo fascinante. El hecho de poder dar vida a un nuevo ser humano, de que de mi cuerpo salga una personita con sus manitas y sus piececitos, que va a tener su propia vida y su propio futuro, me parece algo increíble.
Ser madre implica no sólo dar a luz y presumir de lo bonito que es tu bebé, sino también quererlo, saber educarlo y criarlo con responsabilidad. Eso ya lo tengo claro desde ahora mismo. La gente me dice: "Ahora es muy bonito, pero ya verás cuando tú tengas uno y le tengas que cambiar los pañales", "Sí, a ti te gustan los bebés porque no son tuyos" o "El problema es cuando crecen". Sé que ser madre no es siempre perfecto, pero estoy mentalizada, aun siendo demasiado joven para serlo. Se supone que cuando tienes un bebé (por decisión propia) eres consciente de los pros y los contras.
Yo, en toda mi ignorancia, creo que ser madre te permite dar forma a la mentalidad de un nuevo individuo (o de varios), educándolo y criándolo para que piense igual que tú, o bien para que sepa pensar por sí mismo. Yo quiero criar niñxs que puedan desarrollarse socialmente sin represiones ni estereotipos. Quiero que mis hijxs crezcan con tolerancia y empatía, para poder llegar a ser personas adultas con sentido común. Su profesión, orientación sexual y demás no me incumben, son decisión suya. Me basta con ser madre de personas y no de marionetas del capitalismo patriarcal. Por eso voy a procurar criarlos con una ideología paralela. Va a seguir presente en sus vidas, pero yo voy a estar ahí para guiarlos por el camino de la humanidad, sin dejar que el ya mencionado CP los abduzca sin que ellxs se percaten de su presencia.
En resumen: yo quiero educar a mis hijxs igual (o mejor) que mi madre a lxs suyxs. Si no hubiese sido por mi madre (y mi padre, obviamente), probablemente yo sería otra oveja más del rebaño, un débil y pequeño cerebrito consumido por el patriarcado.

GRACIAS MAMÁ